10 mayo 2011

They also hate Ryanair

Pues sí, no era una paranoia mía. Resulta que no soñé cuando leía que Ryanair ha tenido los santos morros de pedir al gobierno de España que le quite las multas que le han impuesto tanto el Ministerio de Fomento como las diferentes comunidades autónomas. He confirmado que no era una ensoñación al leer hoy la reacción (tibia) del ministerio y de las asociaciones de consumidores (airada) principales de este país, FACUA y OCU, a tamaña desvergüenza.

Sí, el señor O'Leary se piensa que eso de las restricciones, los reglamentos, las normativas y las leyes en general no van con él ni con su compañía. Jolín, ¿pero es que no vemos los demás que si le ponen muchas multas por ser los "macarras del aire" entonces no ganarán dinero? Ya no digamos si pagan sueldos dignos o si dejan de engañar a los pasajeros con cláusulas abusivas o si pagan los impuestos en el sitio donde operan. Sí señores, Ryanair tiene el derecho (divino) a forrarse. Lo demás, competencia desleal e ¡injusta!.

Han creado un monstruo que ahora vuela sin control. Le dieron pábulo a unos piratas del aire que prometían riqueza y empleo a cambio de unas subvenciones de nada. Miraron para otro lado cuando aumentaron las infracciones y el mosqueo subsiguiente de las demás aerolíneas, aquellas que sí cumplían las reglas del juego. Cada gobierno, cada autonomía, cada alcalde quería, para no ser menos que nadie, tener una Denominación de Origen, un equipo de fúbol en Primera División y un aeropuerto internacional con vuelos, como no, de Ryanair. Bueno, pues el engendro se ha revelado y amenaza con morder las manos que antes le alimentaron tan alegremente.

Ahora la pregunta es qué van a hacer los señores gobernantes. ¿Ceder al chantaje o ser sensatos en esta historia por primera vez? Si recordamos los casos recientes de Air Madrid y Air Comet la respuesta debería ser evidente: amputar antes de la gangrena. Adios Ryanair, adios...

1 comentario:

Pau dijo...

Ya está bien de que nos tomen el pelo.