29 noviembre 2010

Dos que nos dejan

Se me pasó comentar la muerte de Berlanga, pero hoy me ha pillado teclado en mano la noticia del fallecimiento de dos personajes importantísimos (para mí) del mundo del cine. En primer lugar, ha muerto Leslie Nielsen, actor impagable en lo cómico, referencia de mil y un gags y un despistado de aniquilación masiva. Gracias a él (entre otros), "Aterriza como puedas" sigue saltándome las lágrimas de risa cada vez que la veo. Gracias y mil gracias por reconvertirse, cuando otros ya encaminan la jubilación, como el cómico cinematográfico más reconocible a nivel mundial.



Y en segundo, ha muerto Irvin Kershner, que a lo mejor a muchos no les dice nada, pero que para mí dirigio una de las mejores películas de todos los tiempos: "El Imperio contraataca". Es oir la marcha imperial y ponérseme los pelos como escarpias. Como decían en La Princesa prometida, hay peleas, luchas de espada, enmascarados, romance, intrigas... Horas y horas de disfrute, no importa cuantas veces haya visto la cinta. Unir entretenimiento y cine de calidad no es nada fácil, los dioses lo saben, y este señor lo logró al menos una vez, lo cual es más de lo que la mayoría de los mortales lograremos nunca. Gracias otra vez y que el dios del cine (que si hacemos caso a Trueba debe ser algo así como Willy Wilder) os acoja en su gloria.

23 noviembre 2010

Donde no hay...

Por cosas del insomnio y el jet-lag llego al hotel en Buenos Aires y, en vez de echarme a dormir, me pongo a ver un extenso resumen del clásico San Lorenzo-River Plate que se jugó el día anterior. Un tostón que terminó cero a cero, en parte por la excesiva precaución con la que salieron los dos equipos (River juguetea con jugar el descenso, gracias a sus malas temporadas pasadas), en parte por la poca calidad de sus jugadores, incapaces de dar dos pases seguidos con sentido o de armar una jugada de ataque en condiciones.

Es algo de lo que se habla ya abiertamente en Argentina: el nivel de la liga local ha descendido alarmantemente y ya se considera de segundo nivel mundial en algunos medios de comunicación. La razón es sencilla: a la fuga constante de talentos futbolísticos, se une la mala situación social y económica que atraviesa el país (esa inflación anual del 18%, por ejemplo). Claro que antes los jugadores salian en cuanto tenían una buena oferta, pero es que la desbandada de ahora es catastrófica para el torneo local. A un chico de diecipocos años como el pibe Araujo, de Boca Junior, le vale una buena actuación en un partido (golazo contra Arsenal) para que el Real Madrid active la opción de compra que tiene sobre él. Messi, Higuain, Gabi Milito, Agüero, Tévez... todos se marcharon muy pronto de Argentina y la tendencia lejos de disminuir, tiende a acelerarse año tras año. Solamente con el 10% de los jugadores que juegan fuera, aunque no fueran los de primerísimo nivel, se podrían armar muchos equipos supercompetitivos en el torneo argentino

No hay solucciones sencillas o inmediatas para este problema, pero está claro que cosas como el modelo anacrónico de dos torneos anuales no ayuda en nada a que los equipos puedan planificar plantillas e ingresos. Se impone un torneo anual a doble vuelta, como el que se juega en Europa principalmente. Eso y un mayor rigor en los presupuestos (por no hablar de intentar acabar con la mafia de las barras bravas) debería poner al futbol argentino de vuelta a la senda de las grandes ligas mundiales.

19 noviembre 2010

Le habla el contestador automático..

... del cerebro del que suscribe. En estos momentos me encuentro demasiado ocupado procesando qué carajo voy a poner de comer hoy, así que no me pida reflexión, análisis o siquiera un chascarrillo sobre el gobierno, lo de l@s cheerleaders, el Sahara o cualquier otro evento presente o pasado (y menos aún del futuro). Deje su mensaje (o no) al término de este párrafo... Ah sí, el pitidito: BEEEEEEEEEEEEEEPPPPPPPPPPPPPPPPPPP.